domingo, 22 de enero de 2017

EL COLEGIO ELIGIÓ AL PRESIDENTE - CONSTITUCIONAL PERO ¿JUSTO?

Estimad@s colegas,

Buen día.

En estos días que el mundo mira a los Estados Unidos de Norteamérica y no por sus quehaceres domésticos a los que nos tiene acostumbrados sino más bien por el inicio de la nueva era con el nuevo presidente Donald Trump, es que nos dedicamos a una cuestión que requiere nuestra atención. ¿Cómo se eligió al nuevo Presidente? ¿La modalidad utilizada es justa? ¿Podría ser distinto?

Empecemos a analizar una vez más los avatares de la democracia de nuestro tiempo. ¿Seguirá llamándose así?


Primer interrogante ¿Cómo se eligió al nuevo Presidente?

Se elige al presidente y vicepresidente por sufragio indirecto, lo que significa que el vencedor se determina por los votos de los electores del Colegio Electoral de Estados Unidos, quienes escogen una nómina de electores de una lista de varias nóminas designadas por distintos partidos o candidatos. Para el conocimiento de los votantes, los electores hacen una promesa de antemano de votar por el candidato de su partido, proveyendo así cierta seguridad y evitando cualquier factor sorpresa. Aquellos electores que voten en contra del voto popular de su estado son llamados "electores deshonestos", pero esto es muy raro que vaya a suceder. El ganador de las elecciones es el candidato que obtenga al menos 270 votos del Colegio Electoral.

Debido a que las leyes estatales regulan cómo los estados escogen los votos de los colegios electorales, en todos los estados, a excepción de Maine y Nebraska, el candidato que gane la mayoría de los votos recibe todos los votos electorales del estado.


Segundo interrogante ¿La modalidad utilizada es justa? 

Estamos ante un sistema que hace posible que un candidato gane el voto electoral y pierda el voto popular (a nivel nacional). Que sea electo presidente de tod@s l@s ciudadan@s aún no habiendo sido votado por la mayoría.

Es por ello que el sistema de voto indirecto a través del Colegio Electoral ha sido muy criticado por varias razones. Cabe destacar que ha sido tachado de anti-democrático, ya que a través de él el Presidente es electo indirectamente y no directamente por.el pueblo, que desiguala a los votantes ya que solo aquellos de los estados decisivos determinan el resultado de las elecciones, y por eso los que no viven en estados competitivos son ignorados por las campañas electorales. También profundiza la mencionada desigualdad en el sentido que las poblaciones de estados muy pequeños, que tiene un mínimo de 3 votos de Colegio Electoral, están sobrerrepresentadas en comparación con los votantes de estados más grandes. 
Por ejemplo, Wyoming tiene una población de 493.782 habitantes y 3 votos de CE, 164.594 habitantes por voto de CE. California tiene una población de 33.871.648 habitantes y 55 votos de CE, 615.848 habitantes por voto de CE. 

Debido a que el mecanismo del Colegio Electoral forma parte del texto de la Constitución Norteamericana requeriría una enmienda a la misma para ser abolido, y dado que 3/4 de los legisladores de estado serían requeridas para ratificar una enmienda que redistribuiría efectivamente el poder de votación de muchos estados pequeños a pocos estados grandes, creemos que tal enmienda jamás sería aprobada.

Por lo que corresponde afirmar que estamos ante un sistema tan constitucional como injusto y desigual. Pero quizás, y viéndolo desde aquí, tan injusto y desigual como válido y eficaz.

Como bonus track podemos compartirles que hasta que se aprobó la Enmienda 12 a la Constitución estadounidense en 1804, el candidato que quedaba en segundo lugar en la elección nacional se convertía en el Vicepresidente. 

En Argentina, una vez se conformó una fórmula presidencial con los dos candidatos de partidos históricamente opuestos (Partido Justicialista-Peronista- y Unión Cívica Radical), imaginen lo que pasó... 

Tercer interrogante ¿Podría ser distinto?

Efectivamente, y haciendo un paralelismo, lo que se logra a través del juicio por jurados es lo que se pierde con el colegio electoral, una sociedad más activa, comprometida e igualada.

A través de los métodos de elección directa, el pueblo queda más próximo a la figura del candidato elegido, se siente satisfecho por aquél a quien erigió al cargo, o culpable si es que no ha sido un buen presidente o legislador o funcionario. Por este motivo y con el paso de los años, se han dictado normas, incorporado planes y desarrollado procesos para que cada vez más funcionarios públicos sean elegidos por el pueblo, algunos ministerios puntuales, jueces, miembros del consejo de la magistratura, fiscales, etc. Ello podría funcionar, probablemente, si fuera acompañado por una creciente pero paulatina descentralización de las tareas públicas como también de los formatos clásicos de organización del Estado.


Espero que les haya gustado el tema y su tratamiento.

Un abrazo cordial, 

Damián R. Pizarro


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